Emm..etto..
si Bueno, la historia, como dice el titulo, se basa en un chico que padece de una enfermedad llamada Hematemesis
Dónde hay una parte del estómago, que seguramente el joven tiene un herida y le hace vomitar sangre
Bueno aquí va la historia: Sin tiempo para vivir Caminaba Goen por la calles, muchas veces preguntándose acerca de la vida, tantas cosas ocupaban su mente, mientras la lluvia le bañaba lentamente y hacían más fríos sus recuerdos. La calles oscuras totalmente iluminadas momentáneamente por los rayos de luz de los faroles de los autos. Pronto llego a casa, algo frustrado con la mente aun en sus recuerdos y pensamientos.. su madre le hablo pero Goen aún estaba distraído casi no escuchaba la voz de su madre, de repente reacciono y le serio cálidamente como si nada pasara, mientras que su madre respondió al cálido saludo de la misma manera. Mientras tanto tomo su chaqueta un poco empapada y el dejo en la entrada se limpió bien los zapatos y movió su cabello mojado para luego dirigirse con su madre y cenar juntos como cada noche
Cuáles eran los pensamientos que rodeaban a Goen, la vida, la muerte, una enfermedad…. Era extraño se preguntaba, una mañana como todas despertó tranquilamente sin ganas de hacer nada y vivir un día más, sin embargo ese día no fue como los otros vividos, esta mañana comenzó a toser sin parar, algún resfriado tal vez, no… que era… poco a poco el líquido carmesí apareció.. No era normal que sucedía.. Algo no estaba bien. Quizás se preguntó comí algo y me hizo daño o acaso… muchas cosa ocuparon su mente, entonces su madre vio lo que sucedía. Minutos después Goen y su madre estaban en el hospital. Su madre angustiada pidió ayuda a alguien para que lo atendieran, una fila de enfermos aguardaban la espera, fueron pacientes, esperaron lo necesario y de repente la enfermera nombro a Goen, era su turno, el doctor le esperaba.
El doctor miraba a Goen, su miraba era penetrante, sin embargo poco a poco la voz del doctor le fue inspirando confianza, mientras tanto la madre de Goen explicaba que le sucedía a su hijo, el doctor le dio palabras de aliento e hizo que pasara a una sala para los estudios necesarios. Estaba un poco nervioso y un tanto preocupado, pero sabía que su madre le veía, mostro más fortaleza. Después de un rato Goen ya algo cansado de lo que sucedía, él y su madre escucharon al doctor mencionar las palabras de espera, para saber los resultados, no quedaba más que la espera, que la preocupación y la esperanza de que todo estaba bien…
Esa misma tarde ainhoa, la novia de Goen le habla como todos los días tan alegre y emotiva como siempre, pero Goen apenas y puede disimular su inquietud hacia lo que paso en la mañana y el hospital, no sabe si mentir o decir la verdad, pero tranquilizo su corazón, no podía preocuparla pues no habían resultados dados, le hablo como solía hablarle todos los días y entonces su corazón se calmó y logro olvidar lo sucedido, ainhoa fue la medicina a su preocupación, entonces todo regreso a la normalidad. Y así un día todo termino como todos los días de Goen, aunque a pesar de ello lo sucedido se mantenía presente.
Al día siguiente un día común para Goen, la tos no apareció quizás fue algo pasajero pensaba, algo sin importancia, entonces su tranquilidad gobernaba su corazón, a medio día, mientras veía a la ventana el hermoso y ancho mar, sucedió lo mismo, lo que no deseaba que pasara, estaba solo y asustado nuevamente el líquido carmesí hizo su aparición, tal parcia que no era algo pasajero, algo sin importancia, luego la tos se calmó pero el miedo se quedó pegado al corazón, perplejo de la situación. Es día no menciono nada a su madre, no quería preocuparle, pues sabría que su mirada y hermosa sonrisa desaparecerían con sus palabras. En la tarde decidió admirar más el mar, quería tranquilizarse un poco, pues solo el mar desde que Goen era pequeño logro calmar dolencias de la vida. Se sentó y luego se recostó sobre la arena, podía sentir el aroma del mar, las olas lentas y la brisa sobre su rostro, mientras de la nada alguien se acercó y le vio directamente mirándole a los ojos, sabía que algo le pasaba siempre lo supo, su amigo Kellen lo vio fijamente desde arriba mientras Goen correspondía la mirada, sabía que ya no podía esconder nada.
Se sentaron juntos un momento mientras observaban el mar y poco a poco el atardecer consumía el ambiente, Kellen espero las palabras de Goen, el viento soplaba cálidamente, Goen aun confuso y titubeando de sus propias palabras no pudo callar más, describió lo sucedido días antes con voz disipada, podía sentir cierta libertad, ya su corazón intranquilo pudo respirar brisas de tranquilidad. Kellen se sorprendió de lo que sucedía, no esperaba algo así, entonces lo miro con tranquilidad mientras una palabra calmo el ambiente... Todo estará bien… Ya lo veraz, aún hay tiempo mucho tiempo para vivir… Por cierto me debes un helado…. Y luego las risas comenzaron a aparecer, ya más tranquilos ambos, veían el anochecer, lentamente el sol se ocultó y las luces de la ciudad iluminaban el lugar.
Llego el día tan esperado, los resultados de los análisis, sin embargo el rostro del doctor mostraba preocupación algo no estaba bien, algo pasaba… Goen y su madre preocupados del ambiente que se desencadenaba no pronunciaban palabra alguna, solo esperaban el veredicto del juez.. El doctor… pero tal sorpresa apareció, el doctor ni siquiera sabía que decir, pues simplemente no sabía lo que le pasaba a Goen aun con los análisis en las mano, todo parecía normal, pero lo que le pasaba no era nada ordinario. La madre aun confusa pregunto al doctor que sucedería con su hijo, que podían hacer o un medicamento que pudiese ayudarle, entonces el doctor comenzó el horrible tratamiento. La única esperanza de calmar la dolencia era eso, esas pastillas que marcaban una esperanza de vida.
Días después aun con el medicamento, el estado de Goen seguía siendo el mismo, el líquido carmesí aun aparecía ante el en las mañanas, haciendo que su corazón mantuviera el miedo de la muerte. Un día después de dos semanas del tratamiento el doctor hizo un llamada muy preocupante, y decisiva, Goen y su madre acudieron al llamado, tal fue la sorpresa que no se esperaban, dado que en ocasiones Goen asistían al hospital, el doctor recomendó una cirugía, tal parecía que la enfermedad aun no encontrada, parecía no ser nada simple.
Nuevamente la tristeza gobernaba el corazón de Goen, solo y sin ánimos veía desde la ventana el inmenso y cálido mar, mientras las gaviotas volaban felices y las personas se divertían como cada día en ese lugar. El día de la cirugía estaba preparada para dentro de dos días, tan rápido pasaba el tiempo, pero sin tiempo para vivir, esos pensamientos rodeaban su mente y su corazón, esa misma tarde recibió la visita de su amigo Kellen, aunque sin ánimos de ver a nadie, Kellen entro muy feliz, sin embargo noto algo raro en su amigo Goen, otra vez esa tristeza le invadía, así que acompaño a Goen a ver el atardecer desde su ventana, un momento de silencio. Que ha sucedido preguntó Kellen, pues tú forma de ser esta distante, dime que ha sucedido… Y así las penas y el dolor fluyo hasta que el corazón encontró un poco de paz.
Los días transcurrieron, el día menos deseado llego, una noche antes contemplo las cosas, le conto a su novia lo sucedido, y aun queriendo olvidar que al siguiente día sucederían muchas cosas, solo horas para ese momento se despidió de ella pensando que en su vida pudo haber pasado muchas vivencias, aventuras, risas y tristezas pero no quedaba tiempo para vivir, el tiempo era basto, sin embargo la vida no. Esos pensamientos gobernaban la mente y corazón de Goen, mientras su madre le acompañaba, mientras esa misma tarde su novia preocupada no podía más que pensar en el momento de la operación, Kellen permanecía en la playa donde veía a Goen cuando estaba preocupado, viendo el atardecer, pensando que aunque la vida de él aún tiene tiempo, un poco más, pero lo suficiente para disfrutarla.
Horas después, aunque ms una eternidad, el doctor salió, todo había terminado, o eso parecía, salió relajado aunque algo perturbado, la operación había terminado, aun había tiempo para vivir. A pesar de todo no se le diagnostico algo concreto a Goen, el permaneció anestesiado un tiempo, pero se recuperaba, mientras su madre velaba su sueño. Cuando recobro la conciencia, sentía paz y un poco de debilidad, pero todo estaba bien, todo regresaba a la normalidad, vio a su madre tranquila a su lado, luego entro el doctor, reviso a Goen y llamo a la madre de Goen, al parecer no sabían que padecía la cirugía no ayudaría a sanar sus dolencias, hasta no saber qué es lo que padecía, la angustia regreso al corazón de la madre de Goen, tal parecía que la vida aun peleaba contra el tiempo solo para permanecer un poco más.
Los días transcurrieron, y Goen regreso a casa, su novia ansiosa le esperaba feliz y sus amigos también, Goen había regresado, tiempo de reposo ayudo a mejorar su estado, sin embargo los síntomas no desaparecían, el líquido carmesí aun aparecía cada vez que tosía y el corazón lleno de angustias, lleno de inseguridad y de temor, porque aun permanecía esto se preguntaba, acaso no hay forma de que esto se detenga de que la vida transcurra.. por qué el dolor no desaparece… la mente se nublaba de pensamientos, permaneció así pero no podía dejar que las cosas sean tan oscuras, aun valoraba la vida, aún hay esperanzas para vivir, ese día regreso al doctor, pero este no le dijo nada, simplemente medicamento, harto de esas pastillas que tomaba diariamente y a cada momento pero si eso ayudaba a vivir, valdría la pena, por más desagradables que fueran, ya de regreso a casa su madre le esperaba, almorzaron juntos y cada uno volvió a la rutina. Así que ella veía como las cosas no daban un paso más, parecía todo estático pero lo único que parecía desvanecerse era el tiempo para él, sin tiempo para vivir, había que cambiar eso. Así que busco otras alternativas, alguien más debías dar una respuesta y una solución. Así fue como llegaron a manos d alguien más, alguien tenía que dar una nueva esperanza, nuevamente estudios y más estudios pero de algo tenía que servir un poco de sufrimiento. Tiempo de espera para resultados, la eterna espera, la eterna angustia, el tiempo se hacía cada vez más largo.
El atardecer parecía abrigar la vida, el corazón, los pensamientos… se dirigió a la playa que cuenta y protege sus penas, tomando sus recuerdos y tranquilizando un poco el alma, mientras de la nada Kellen aparecía, como el viento inesperado, se sentó al lado de Goen, la brisa refrescaba y el aroma del mar rodeaba el lugar, las gaviotas volaban unas sobre otras, las personas nadaban en la playa, riendo, jugando, un día común y corriente. Para sorpresa de Goen un helado de galleta cubierto de chocolate y galleta se presentó…Kellen dijo.. Esto es para endulzar la vida, calmar el corazón y quitar el hambre, si es que tienes.. No se me olvida que me debes uno… esperare con ansias después de tus análisis, no olvides que no se me olvidara, lo tendré presente, ahora disfruta el momento, disfruta la vida. Así el tiempo transcurrió, la tranquilidad regresaba de nuevo…
Tiempo, hermoso y desesperante tiempo, el día llego y la noticia con él, los resultados ya estaban y una respuesta había nacido, ya había un nombre, un culpable…Hematemesis… Adiós a los medicamentos… sin embargo una nueva cirugía peligrosa pero necesaria para poder tener nuevos vivencias, experiencias… un final diferente al que aparecía ante sus ojos. Disfruto la semana, paso momentos con su madre, su novia, sus amigos, Kellen solo le dejo un mensaje… nos vemos después de tu operación, hasta ese entonces podre aceptar un helado de galleta de ti, hasta ese entonces nos volveremos a ver, todo saldrá bien….
El día decisivo llegó, el definitivo, todo estaba listo, habría que burlar de nuevo a la muerte, una vez más… quirófano listo, doctores preparándose, y el paciente lentamente cubriéndose por los reflectores de la sala de operación, todos aguardaban en la sala de espera, con ansias, angustias, desesperación….
Todo termino, la espera también, todos salen de ese lugar llamado quirófano… la angustia se hace cada vez, más y más grande… desesperación… un paso más hacia la verdad… la madre de Goen pudo verle de lejos… que pasaba… el silencio inundaba el lugar… rostros sin emociones o gestos… que penetrante se hacia el silencio parecía lastimar el corazón y el alma… Pero una sonrisa iluminó el lugar y la angustia lentamente se desvanecía… las palabras más cálidas, las palabras más hermosas y calmantes salieron de la voz de un ser humano… Todo salió bien, su hijo ahora se recupera… Todo ha terminado… y el doctor regreso a su rutina, un descanso después de una larga jornada y eterna satisfacción, una vida más tenía tiempo en este mundo, y así como el tiempo dispone de muchas cosas, también sana y recupera.
Y así caminando alegremente, con su madre a lado, regresaron a casa a desayunar, almorzar y cenar como todos los días lo hacían, a disfrutar del internet y encontrar a sus amigos y su novia como había sido antes de tanta angustia y desesperación. Pero una tarde regreso a la playa, aquella que guardaba el secreto de sus pensamientos y sus penas, pero esta vez quería que guardara algo nuevo y diferente una sonrisa de felicidad un momento de tranquilidad, Kellen en la arena bajo el inmenso cielo, viendo un atardecer de diversos y maravillosos colores.. Goen se sentó a su lado y dijo… el día llego y no se me olvida lo que te debo, toma.. de galleta igual al de aquel atardecer, solo que sin penas, solo con felicidad…Kellen tomo se sentó, tomo el helado y ambos degustaron lentamente mientras la brisa, las aves, las personas disfrutaban la vida como ellos…. Aun había tiempo, mucho tiempo para vivir…
¿Qué les pareció? no lo escribí yo si no un amigo
si no lo sabían..
El chico era yo n_n
Saludos
Sayo 
Miér Jul 04, 2012 3:28 pm por 
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